Amigos constructores, ¡el calor está intenso estos días! Por eso no debes olvidar protegerte del sol para evitar enfermar y continuar con tu día a día, construyendo las viviendas más resistentes del país. Y ¿sabes? Así como debemos cuidar de nosotros mismos, también de cada proceso que realizamos en obra; después de todo, de eso va a depender la seguridad de las construcciones y el de las personas que las habiten o transiten por ellas.
Parte elemental de este cuidado, implica no cometer errores al manipular el concreto. Y es que, si esto pasa, no solo nos podemos enfrentar a problemas estéticos, sino también estructurales. Por ejemplo, ¿sabías que una mala manipulación del concreto podría hacer que la construcción no resista la carga para la que ha sido diseñada? Por este y otros motivos, en esta publicación me gustaría contarte cuáles son los más comunes y cómo puedes evitarlo. ¡Atento a esta nota!
1. Una mala proporción entre el uso de agua y cemento
Una mezcla con exceso de agua puede resultar en concreto débil y poroso, comprometiendo su resistencia y durabilidad. Por otro lado, una mezcla con poca agua puede dificultar la trabajabilidad y la colocación adecuada. Esto puede llevar a una segregación del concreto y a una distribución desigual de los materiales, causando agrietamiento y fallos estructurales. Para evitarlo, es fundamental seguir cuidadosamente las indicaciones de mezcla, manteniendo la proporción correcta de agua, cemento y agregados. Realizar pruebas de consistencia y trabajar con personal capacitado asegura una mezcla adecuada y una construcción duradera.
2. Mezclar mal los agregados
Compañeros constructores, al mezclar los agregados incorrectamente en el concreto, corremos el riesgo de segregación, agrietamiento, polvo en la superficie, formación de lechada y desprendimiento. Estos errores comprometen la resistencia y durabilidad de nuestras obras. Mantener una mezcla uniforme es esencial para evitar estos problemas y asegurar la integridad estructural y estética de nuestras construcciones. Tomémonos el tiempo necesario para mezclar adecuadamente los materiales, evitando así costosas reparaciones y fallos prematuros. Construyamos con excelencia y atención al detalle en cada paso del proceso. ¡Nuestras obras merecen lo mejor!
3. No proporcionar la vibración adecuada
Una vibración insuficiente puede llevar a la formación de bolsas de aire atrapadas dentro de la mezcla, lo que debilita la resistencia del concreto y crea áreas propensas a la segregación. Esto puede causar una distribución desigual de los agregados y la lechada, comprometiendo la durabilidad y estabilidad de la estructura. Para evitarlo, es crucial utilizar equipos de vibración adecuados y aplicar vibraciones uniformes durante el vaciado. De esta manera, aseguramos una mezcla compacta y homogénea, evitando problemas futuros y garantizando la calidad de nuestras construcciones.
Estos son los errores que más he visto en construcciones en la ciudad, especialmente en aquellas que no siguen las indicaciones de los expertos ni cuentan con personal capacitado. Como buenos maestros constructores, estemos atentos para que no sucedan en nuestros proyectos. De esto va a depender que levantemos viviendas sismo resistentes y duraderas para más peruanos.
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