¡Sigamos aprendiendo juntos, maestro! Hoy me gustaría hablarte de un tema con el que muchas veces nos encontramos en las obras: la losa maciza y losa aligerada. Como profesionales del sector, conocemos muy bien las diferencias que existen entre ambas y en qué casos se usan; sin embargo, muchas veces los dueños de obra (clientes, no arquitectos ni ingenieros) desconocen esta información; por lo que debemos ponernos en el rol de instructores y explicarles. Así pueden entender mejor por qué se usó un tipo de losa en vez de otra.
En esta publicación te hablaré de este tema como lo hago con mis clientes, para que, de esa manera, también puedas inspirarte y explicárselos en términos sencillos.
¿Qué son las losas macizas y aligeradas?
¿Sabes por qué es importante saber explicarles a los clientes qué es y qué diferencia tienen estos tipos de losas? ¡Simple! Porque muchas veces los clientes confunden las losas aligeradas con un material defectuoso o de baja calidad, cuando no es para nada cierto.
Como bien sabemos tú y yo, las losas aligeradas son igual de resistentes que las losas macizas. De hecho, sabemos que lo único que las diferencia es la manera como se construyen.
Entonces ¿cómo definimos cada una?
Losas macizas
También llamadas losas tradicionales. Se trata de losas que, para ser hechas, cuentan con una armadura de acero. Luego de contar con esta armadura, los maestros vaciamos concreto sobre ellas, hasta alcanzar un grosor que puede ir entre los 7 y 15 centímetros. En general, vemos losas macizas de 10 centímetros.
Como sabemos bien quienes hemos construido losas macizas, el proceso constructivo de estas no es rápido, fácil y además conlleva el uso de gran cantidad de material. Por este motivo, se suele usar hoy para azoteas o entrepisos. Además, son el tipo de losa más común en construcciones residenciales de pocos pisos.
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Losas aligeradas
Este tipo de losas se conocen también con el nombre de losas reticulares. En este caso se usan paneles de vigueta y bovedillas, que son sistema de acero y concreto, que se hace a medida, es más ligero y tiene un espesor mayor al anterior: de 15 a 30 cm. La forma como están hechas favorece además la distribución de carga en la construcción ¿lo sabías?
En el caso de las losas aligeradas, una diferencia clave con las macizas es que, por la forma y por su espesor, tienen propiedades termoacústicas superiores a las tradicionales. Así que cuando tu cliente crea que una losa aligerada es menos eficiente, háblales de este rasgo, verás cómo cambia su actitud frente a ellas cuando sepa que los ruidos del piso superior no afectarán al del inferior.
Ahora que te he contado sobre ambos tipos de losas, en términos simples de entender; aquí algo más que puedes explicar a tus clientes: la elección de la losa no es arbitraria, responde a las necesidades de cada proyecto, así como a su diseño. ¡Comparte esta información y sigamos aprendiendo juntos, maestro!
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Excelente publicación los felicito
Excelente!
Gracias , excelente publicación