Todos los profesionales de construcción, debemos firmar un contrato cada vez que iniciamos un nuevo proyecto. Así, dejamos clara la base de nuestro trabajo, y los derechos y responsabilidades que tenemos tanto nosotros como las personas que nos contrataron y el resto de nuestro equipo.
Además de dejar las cosas claras, desde el inicio, un contrato de construcción también es una muestra de nuestro profesionalismo; y, a largo plazo, nos ayuda a establecer relaciones sólidas con nuestros clientes.
En esta publicación me gustaría abordar más de cerca este tema; además de darte algunos consejos para ayudarte a elaborar tu contrato de construcción.
¿Qué es un contrato de construcción?
Si tenemos que definir los contratos de construcción, podríamos decir que son documentos en los que consta el acuerdo al que hemos llegado con nuestros clientes. De esa forma, las partes infaltables de un contrato de este tipo son:
- Los términos y condiciones del trabajo.
- El alcance del trabajo que realizaremos.
- El tiempo de conclusión del proyecto.
- El monto acordado de pago y fechas de pago.
- Las responsabilidades que aplican tanto para nosotros como para quien nos contrata.
Además de lo dicho, un contrato de construcción también puede tener cláusulas adicionales determinadas antes de su firma.
Entre la gama de contratos de construcción, existen distintos tipos y hay que saber bien cuál elegimos para nuestro proyecto. Por ejemplo, si firmamos un contrato de mano alzada, acordamos un pago fijo con el contratante; por eso, si elaboramos este tipo de contrato debemos haber evaluado bien todos los costos asociados a nuestro trabajo. Otro tipo de contrato que podemos firmar es el de precio unitario; en este el pago total corresponde a la suma de todos los costos. Finalmente, también está el contrato de costos reembolsables, donde tras entregar la obra nos reembolsan los gastos reales, más una tarifa por gastos generales y la ganancia.
Pasos para elaborar un contrato de construcción
Ahora que conoces la importancia y los tipos de contrato de construcción que puedes firmar; sigue estos pasos para elaborar uno.
1. Identifica y describe el proyecto
Este paso debe abarcar la ubicación, fechas de inicio y finalización, y la descripción legal de la propiedad.
2. Crea un cronograma de entrega y fija los pagos
Detalla un cronograma proyectado que incluya plazos para la finalización y fechas proyectadas. Asimismo, establece un cronograma de pagos, indicando si se requiere un depósito, la frecuencia de los pagos y el monto total estimado del proyecto.
3. Incorpora cláusulas importantes
Como la suspensión del trabajo y de pago, una cláusula de caso fortuito, y un acuerdo de orden de cambios para abordar posibles modificaciones en el proyecto.
4. Incluye una garantía por tu trabajo
De esa manera el contratante tendrá más confianza en tu labor; y abrirá puertas para futuras contrataciones.
5. Ajusta el contrato según cada proyecto
Finalmente, te recomiendo ajustar el contrato según las necesidades específicas del proyecto y las preferencias de ambas partes, garantizando una comprensión mutua de las expectativas y responsabilidades.
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