El 4 de marzo se conmemoró el Día mundial de la ingeniería para el desarrollo sostenible. Espero que lo hayas celebrado cómo se debe; es decir, contribuyendo a construir viviendas que tengan un bajo impacto en nuestro medioambiente. Con motivo de esta celebración, me gustaría hablarte acerca de qué se viene haciendo en la industria de la ingeniería y construcción para reducir nuestra huella de carbono. ¡Tomemos conciencia y contribuyamos!
1. Utilizando materiales con menor impacto medioambiental
Esto incluye la preferencia por materiales como madera certificada, que proviene de bosques sostenibles y ayuda a reducir la deforestación. Además, se están utilizando cada vez más materiales reciclados, como el acero reciclado o el vidrio reciclado, que requieren menos energía para ser producidos en comparación con los materiales vírgenes. De igual manera, los materiales de construcción como el concreto están evolucionando hacia fórmulas más ecológicas, que utilizan menos cemento y emiten menos CO2 durante su producción.
2. Promoviendo la renovación en vez de la demolición y construcción de nuevas edificaciones
En lugar de demoler estructuras completas y construir desde cero, se promueve la actualización y mejora de edificios ya existentes. Esto no solo ahorra recursos y energía que se utilizarían en la construcción de un nuevo edificio, sino que también conserva la historia y el carácter de las estructuras antiguas. Además, las renovaciones pueden incluir la implementación de tecnologías más eficientes desde el punto de vista energético, como sistemas de calefacción y refrigeración de alta eficiencia, iluminación LED y aislamiento mejorado.
3. Reutilizando materiales aún viables
Esto implica recuperar y utilizar elementos de edificaciones demolidas o en desuso, como vigas de madera, ladrillos, ventanas, puertas, entre otros. Estos materiales pueden ser restaurados y reintegrados en nuevas construcciones, lo que reduce la necesidad de producir nuevos materiales y disminuye la cantidad de residuos. Además, esta práctica fomenta la economía circular, donde los recursos se utilizan de manera más eficiente y sostenible.
4. Usando vehículos y máquinas bajas en emisiones de carbono
Esto incluye la transición hacia equipos eléctricos, híbridos o que funcionen con biocombustibles renovables. Por ejemplo, se están utilizando cada vez más excavadoras eléctricas, camiones de construcción híbridos y grúas que funcionan con biodiesel. Estas tecnologías no solo reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, sino que también disminuyen la contaminación del aire en los sitios de construcción, mejorando así la calidad del aire para los trabajadores y las comunidades cercanas.
5. Mejorando la gestión de residuos de construcción
Se están implementando estrategias para minimizar los desechos generados durante la construcción, como el uso eficiente de materiales y la planificación cuidadosa de los procesos constructivos. Además, se promueve la separación y el reciclaje de los residuos en lugar de enviarlos directamente a vertederos. Esto incluye la clasificación de materiales como madera, metal, plástico y hormigón, para que puedan ser reciclados o reutilizados en otras aplicaciones.
Ya lo sabes, maestro. Queda en manos de toda nuestra comunidad, ponernos la camiseta ecológica y seguir contribuyendo con buenas prácticas y la implementación de innovación y tecnología, para reducir nuestra huella ambiental ¡juntos es posible!
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