Amigo constructor, ¿estás familiarizado con las cimentaciones superficiales y cimentaciones profundas? ¡Estoy seguro de que sí! Y es que son nociones que todo maestro de obra debe conocer. Sin embargo, me gustaría que hagamos una repasada rápida al tema para entender qué las diferencia y sus aplicaciones.
Cimentaciones ¿qué son?
Primero, comencemos por entender el concepto de las cimentaciones. Se trata de una estructura que será el puente para transferir las cargas totales al suelo. Si tenemos que hablar de sus tipos, las cimentaciones pueden ser superficiales o profundas principalmente.
Cimentaciones superficiales
Las superficiales básicamente se entienden como aquellas cuya profundidad no excede cinco veces su ancho.
Cimentaciones profundas
Por otra parte, las cimentaciones profundas comprenden todas aquellas que superan esta medida.
Diferencias entre cimentaciones superficiales y profundas
Existen varias diferencias entre las cimentaciones superficiales y profundas, más allá de su profundidad; entre estas las siguientes:
1. El tipo de suelo sobre el que se usan
En general, las cimentaciones superficiales se suelen emplear en suelo estables, mientras que las cimentaciones profundas en suelos menos estables o que presentan características geotécnicas que requieren transmitir las cargas a capas más profundas y más compactas.
2. El tipo de construcción
En general, las cimentaciones profundas se emplean para construcciones que van a soportar cargas mayores; por ejemplo, un edificio de oficinas o departamentos. Mientras que en el caso de las cimentaciones superficiales se utilizan más comúnmente en construcciones más ligeras o de menor carga, como viviendas unifamiliares, pequeños comercios o estructuras industriales de menor tamaño.
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3. Costo de ejecución
Las cimentaciones superficiales tienden a ser más económicas en comparación con las cimentaciones profundas. Esto se debe principalmente a que las primeras requieren menos excavación y material para su construcción. Además, el proceso de instalación suele ser más rápido y menos complejo, lo que contribuye a reducir los costos generales del proyecto. Por otro lado, las cimentaciones profundas implican trabajos más especializados, como la instalación de pilotes, que requieren equipos y técnicas específicas. Esto incrementa significativamente los costos de mano de obra y materiales, así como los tiempos de construcción.
4. Tipos de cimentaciones
Las cimentaciones superficiales incluyen zapatas aisladas, que distribuyen cargas puntuales como las de columnas individuales; zapatas combinadas, que pueden soportar múltiples columnas; y cimientos corridos, utilizados para distribuir cargas a lo largo de muros o mampostería. Por otro lado, las cimentaciones profundas comprenden pilotes y cajones. Estos sistemas son esenciales cuando el suelo superficial no ofrece suficiente capacidad de carga o estabilidad, permitiendo construir sobre terrenos menos favorables de manera segura y eficiente.
¿Cómo puedes saber el tipo de cimentación que necesitas para tu proyecto?
Para esto, básicamente es necesario realizar un estudio geotécnico que permita conocer la resistencia que tiene el terreno a la penetración. Además, es necesario que consideres la carga de la estructura que será construida sobre él.
La elección de la cimentación adecuada garantizará la seguridad y estabilidad a largo plazo de la construcción. Así que ya lo sabes maestro, ¡no te tomes a la ligera el tema! Sigue las indicaciones de ingenieros y arquitectos, para hacer la cimentación adecuada del proyecto.
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